Reposo
El reposo, aunque no es indispensable, permite que los jugos de la carne se distribuyan homogéneamente y que los tejidos conectivos de la carne sigan rompiéndose para hacerla más blanda.
El reposo, idealmente en papel metálico (alusa foil o similar), aunque no es indispensable, permite que los jugos de la carne se distribuyan homogéneamente y que los tejidos conectivos de la carne sigan rompiéndose para hacerla más blanda. Es especialmente importante hacer esto con cortes grandes.
Si tratas de cortar tu carne ahumada inmediatamente después de terminar de ahumar, la mayor parte del jugo se perderá en la tabla de cortar. El reposo mediante la técnica enseñada más abajo también permite mantener la carne caliente por más tiempo y flexibiliza los tiempos en que puedes servirla. La carne que se mantiene bajo este procedimiento puede mantenerse caliente por varias horas.
EL MÉTODO DEL PAPEL ALUMINIO
- Envuelve la carne en un par de capas de papel aluminio (tipo alusa foil).
- Envuelve la carne ya cubierta por papel aluminio en una toalla (o paño de cocina).
- Deja la carne envuelta en un lugar seco y limpio, por ejemplo dentro del microondas.
- Deja la carne reposar por al menos unos 30 minutos. Si tienes tiempo, entonces deja la carne por 2 a 3 horas, y después de esto ya puedes servir. La diferencia será notable, inténtalo.